El teatro de marionetas o bunraku es una de las señas distintivas de la cultura escénica de Japón.
Al parecer, las marionetas ya eran famosas en el país nipón desde el siglo VII, cuando actores ambulantes procedentes de China y Corea recorrían el país con sus obras de carácter semireligioso. Sin embargo, lo que hoy se conoce como bunraku, no se consolidó hasta los siglos XVI y XVII, cuando a los actores se les unieron los narradores y el acompañamiento de shamisen (laúd japonés), que brindaron mayor atractivo al espectáculo.
El bunraku es un teatro para adultos que versa sobre temas profundos y universales como una obra de Shakespeare: venganza y sacrificio, amor y rechazo, reencarnación y futilidad.
Tres actores dan vida a cada marioneta; de por sí, todo un prodigio de coordinación, ya que, en principio, la audiencia no debe percibir los aspavientos de estos silenciosos profesionales para poder concentrarse en los muñecos.
Su tamaño es, aproximadamente, una tercera parte del de una persona. Se tarda algunos minutos en dejar de lado las suspicacias, pero una vez que se ha conseguido, el bunraku puede llegar a ser más conmovedor que una obra representada por actores reales.
Los hijos del bunraku, estereotipos idealizados son mucho más cautivadores y simpáticos que sus colegas del kabuki. El papel más esforzado es, quizás, el de los narradores, o gidayu, que hablan, gesticulan, gimen y sollozan arrodillados en el lado izquierdo del escenario. El pequeño auditorio del Teatro Nacional de Tokio es el lugar ideal para presenciar una obra de bunraku.
Desde que vi "Dolls" de Takeshi Kitano, estoy deseando ver una pieza de Bunraku. Aunque es España eso no sea demasiado fácil. Me parece impresionante la expresividad que pueden sacar de unas marionetas.
ResponderEliminarGracias por acercarnos un poco más a este arte.
Recibir comentarios de este tipo me dan fuerzas para seguir publicando artículos. En un futuro no muy lejano espero poder asistir a un especáculo de bunraku en Japón y poderlo contar en el blog. Gracias.
ResponderEliminar