El Kojiki (registro de las cosas antiguas) es considerado una de las fuentes más importantes para entender el nacimiento y despertar del pueblo japonés. En sus líneas narra las tradiciones nacionales del país del sol naciente des de los primeros dioses creadores del archipiélago hasta el reinado de la emperatriz Suiko (593-628). En la obra recopilada por Ono Yasumaro encontramos mucha mitología y más bien poca parte histórica, a la vez que se mezclan poemas, canciones y leyendas. Así pues, podríamos considerar el Kojiki como la manifestación más antigua de la literatura mitológica japonesa. Una literatura existente en muchas otras civilizaciones y que es considera el texto fundacional de estas.
La obra se compone de tres libros o maki, que siguen una clara distinción tanto en su temática principal como en el valor que los identifica.
Primera Parte: la era de los Dioses. La mitología es la base de esta primera parte, donde la creación del cielo y la tierra, la formación del archipiélago japonés y los mitos sobre los dioses fundadores acaparan el protagonismo.
Segunda Parte: la era de los Héroes. A diferencia del primer libro, esta parte cuenta con un valor mucho más literario, incluso más histórico. Empieza en tiempos del considerado primer emperador Jimmu y abarca hasta el reinado del emperador Ôjin, que se extiende en el siglo V de nuestros tiempos. Un emperador del cual ya existen fuentes históricas.
Tercera Parte: la era de los Hombres. Esta última parte es la de más valor histórico de las tres y cubre los sucesos que van des del emperador Nintoku (313-399) hasta el reinado de la emperatriz Suiko (592-628).
Por tanto, nos encontramos ante un documento que entremezcla realidad y mitología y que, dejando a un lado aquellos relatos marcadamente mitológicos, hace preguntarse al lector cuanto de lo que lee se sustenta en la historiografía real japonesa y cuanto de ella es ficticia.
La obra se compone de tres libros o maki, que siguen una clara distinción tanto en su temática principal como en el valor que los identifica.
Primera Parte: la era de los Dioses. La mitología es la base de esta primera parte, donde la creación del cielo y la tierra, la formación del archipiélago japonés y los mitos sobre los dioses fundadores acaparan el protagonismo.
Segunda Parte: la era de los Héroes. A diferencia del primer libro, esta parte cuenta con un valor mucho más literario, incluso más histórico. Empieza en tiempos del considerado primer emperador Jimmu y abarca hasta el reinado del emperador Ôjin, que se extiende en el siglo V de nuestros tiempos. Un emperador del cual ya existen fuentes históricas.
Tercera Parte: la era de los Hombres. Esta última parte es la de más valor histórico de las tres y cubre los sucesos que van des del emperador Nintoku (313-399) hasta el reinado de la emperatriz Suiko (592-628).
Por tanto, nos encontramos ante un documento que entremezcla realidad y mitología y que, dejando a un lado aquellos relatos marcadamente mitológicos, hace preguntarse al lector cuanto de lo que lee se sustenta en la historiografía real japonesa y cuanto de ella es ficticia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario